Cuando hablamos de motores marinos hay que mencionar a Volvo Penta, uno de los fabricantes en quien confían más patrones de la náutica recreativa, pesca y profesional. Sin menosprecio de marcas como Mercury o Yanmar, por citar alguna.
Dentro de la gama de Volvo hemos puesto el punto de atención en la serie de motores IPS para embarcaciones de náutica recreativa. Sus opciones, características y modelos son lo que hoy traemos a la palestra.
¿Qué es el sistema de propulsión IPS?
Hace unos años, Volvo Penta presentó una innovadora propuesta de motorización en sus motores intra-fueraborda o en “Z”. El sistema Inboard Performance System, IPS, óptima cada giro transmitido a las palas con un conjunto de dobles hélices de giro contrario. Dos hélices se sitúan una a popa de la otra con giro contrarrotante, o lo que es lo mismo: una gira en sentido levógiro y la otra en sentido dextrógiro.
Este sistema de hélices contrarrotantes no es nuevo. Se puede ver en otros motores de la competencia. Lo que hizo Volvo fue darles la vuelta, es decir, las hélices están orientadas hacia proa. Esto tiene ventajas e inconvenientes.
En la lista de “contras” uno destaca sobre cualquier otro: las hélices están desprotegidas y tienen mayor riesgo de enganchar un cabo u objeto flotante durante la navegación. En la imagen se observa claramente la circunstancia. Al estar las hélices orientables a proa de la mecha y su propio eje son las primeras en recibir cualquier objeto flotante que pase bajo el casco, con el añadido de que la pala-timón evita que se libere del obstáculo. Sin embargo, son varias las ventajas que ofrece este sistema propulsor.
¿Por qué escoger el sistema IPS?
Según el propio fabricante, sus motores de la gama IPS están diseñados para el gobierno de embarcaciones y buques de recreo de entre 9 y 30 metros. La combinación puede ir desde dos ejes con máquinas independientes (con los que las maniobras se simplifican) hasta cuatro motores instalados en popa.
Suma a la lista de “pros” un menor consumo de combustible (diésel), en torno al 30% de ahorro. También son máquinas más silenciosas que la media y con una velocidad punta mayor que motores de la misma potencia con diferente sistema de propulsión.
La orientación hacia proa de las hélices añade maniobrabilidad al barco. Las palas reciben el flujo de agua sin ninguna distorsión, más que la corriente de arrastre provocada por el casco. Una mayor superficie de la pala de timón y el conjunto de hélices orientables procura una respuesta mayúscula en maniobras y navegación. En puerto, bastan los dos ejes de popa orientados de forma independiente para atracar el barco sin necesidad de hélice de proa. El sistema viene a ser similar al instalado en los grandes catamaranes de pasaje.
En la consola de mando el sistema IPS se traduce en simplicidad. En vez de rueda de gobierno, la embarcación se maniobra a la orden de un joystick con las funciones integradas, además de las palancas de velocidad e inversión de la marcha con diferenciación de banda.
El hecho de que el sistema sea completamente electrónico permite su integración con otros equipos de abordo. Pero sobre todo la navegación y maniobra son mucho más intuitivas, sencillas y seguras (no hay que tener en cuenta el par evolutivo, tan solo mover el mando hacia donde se quiera mover el barco).
Máxima potencia
La gama Volvo Penta IPS conquista no solo por la facilidad de manejo, sino por las opciones de motorización que ofrece: desde la versión más reducida (IPS350) de 260 CV, ofrecidos por un motor de 4 cilindros de 3,7 litros, al hermano mayor de la gama, el IPS1200 de 900 CV suministrados por 6 cilindros que suman 12,8 litros.
Todos ellos montados en doble, triple o cuádruple (para quienes necesitan de la mayor potencia).
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