Tres meses después de dar a luz a su primera hija, la campeona olímpica de Londres 2012 Marina Alabau vuelve a competir. La windsurfista sevillana, Premio Nacional del Deporte, tiene por objetivo ir a Río para intentar revalidar el cetro olímpico en RS:X F.
Alabau tomará parte este fin de semana en el Trofeo Internacional de Gran Canaria. “Será una oportunidad para hacerme una idea de cómo estoy en comparación con el resto de windsurfistas”, explica la medallista, que espera llegar al cien por cien al Campeonato del Mundo, que se disputará en Santander en septiembre.
La sevillana se ha sometido a un estricto entrenamiento para volver a la competición con opciones: “Cuando Marta tenía un mes empecé a ir al gimnasio y estuve un mes haciendo preparación física; cuando tenía dos meses empecé a navegar y aunque el primer día me encontré un poco rara el segundo día ya estaba teniendo buenas sensaciones. He hecho mucha bicicleta para perder peso y coger cardio. He tenido una evolución muy buena y la verdad es que me ha impresionado lo rápido que me he recuperado”.
Marina Alabau se siente “muy motivada” en su regreso a la competición, que consigue compaginar con la rutina de los cuidados de un bebé de tres meses gracias a la ayuda de su familia: “En el aspecto logístico es mucho más complicado, porque de momento no puedo separarme de Marta. Como mi marido es mi entrenador, viajamos también con mis suegros, que se ocupan de ella cuando estamos en el agua”.
“Después de Pekín 2008, donde quedé cuarta, no paré de entrenar, con el ojo puesto en Londres. Ahora, después del oro, me he relajado, me he casado, he tenido una niña y un año después he vuelto a los entrenamientos y a la competición”, reconoce la hispalense, que admite que se enfrentó al parto con la misma mentalidad que aplicó en los Juegos Olímpicos: “Ninguna de las dos experiencias es para repetirla a menudo. Son momentos duros que me han dado a mí y a los que me rodean una gran alegría. En el parto, al igual que en una competición, me dije: ‘Marina, vas a sufrir unas horas pero tendrás una gran recompensa’. Como dice mi preparador físico, ‘el dolor es temporal; el orgullo, para siempre”.
También con una mentalidad similar se puso a entrenar en kite cuando la ISAF decidió sustituir la tabla a vela, el RS:X, por la cometa en el programa olímpica de Río: “En los Juegos Alex [Guyader, su marido y entrenador] no paraba de decirme que me centrara en el presente, que el objetivo estaba en Londres y que lo que pasara después nos daba igual. Una vez acabados los Juegos nos pusimos a entrenar en kite. Es un deporte muy divertido, me gustó, pero es complicado si te quedas sin viento y no puedes levantar la cometa, si pierdes la tabla o te tiran una cometa encima. Todo eso me pasó y fue muy frustrante. La verdad es que nos pusimos muy contentos cuando volvió el windsurf”.
Marina Alabau luchará en los próximos meses por estar en Río e intentar revalidad el oro olímpico. “Pero no olvidemos que sólo va un representante por país y en tres años pueden pasar muchas cosas. Antes tengo que entrenar mucho… eso sí, conozco el camino”, asegura.
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