Se reduce el número de peces aguja y se recupera el pez espada

Los grandes ejemplares del Atlántico han sido objeto de estudio por varias comisiones de investigación dependientes de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico, ICCAT. Los datos de los análisis efectuados durante los últimos años demuestran que hay una tendencia a la recuperación de las poblaciones de pez espada, mientras el pez vela se estabiliza en sus hábitats y se reduce el número de ejemplares de aguja azul y aguja blanca.pesca deportiva altura

Pez espada

En la valoración del estado de las pesquerías de pez espada han colaborado varias instituciones científicas de ambos lados del Atlántico. Desde España el Centro oceanográfico de A Coruña ha sido el responsable de colaborar en el programa de balance, en el que se ha constatado una recuperación de los peces espada, tras una acusada explotación por parte de la industria pesquera con repercusión en la pesca deportiva de altura.

La revista Fisheries Science ha sido la encargada de publicar el resultado de los estudios llevados a cabo en referencia a las grandes especies. Según esta publicación, en el último lustro, desde 2009, se puede comprobar una recuperación de la especie de pez espada en niveles suficientes para garantizar el Rendimiento máximo sostenible (RMS) de las pesquerías. Esta buena noticia viene de la mano de políticas que han limitado la pesca industrial, artesanal y recreativa.pez aguja azul

Pez vela

No tan halagüeños, pero sí esperanzadores, son los datos arrojados en referencia al número de peces vela que nadan en el Atlántico.

El pez vela es la especie más abundante en las aguas de este océano de las tres Istiophorus. Su pesca por parte de la flota del oeste Atlántico dedicada al atún, ha mermado la población de esta especie hasta hacerla peligrar. No obstante, los estudios revelan que el número de ejemplares se ha estabilizado en las principales pesquerías donde tiene presencia, según apunta la ICCAT. Si bien, se pone de manifiesto en la publicación la necesidad de mejorar los estudios sobre esta especie, determinando el espectro genético, edades, estimación del crecimiento, hábitats preferentes, dinámica reproductiva y demás parámetros que sí se tienen muy en cuenta en especies más comerciales como el atún rojo.pez aguja blanco

Aguja azul y blanca

Las especies de aguja azul (Makaira nigricans) y aguja blanca (Tetrapturus albidus) han experimentado en el último lustro un ligero descenso en el número de ejemplares en las pesquerías donde son capturados, según el informe del ICCAT. Para la Comisión, estas especies están sobreexplotadas por las pesca industrial, a lo que se suma la pesca tradicional y la pesca recreativa de altura. Lo que pone de manifiesto la necesidad de establecer un plan de protección y recuperación antes de que la especie entre en un estado alarmante por el descenso de la población.

A estas especies se suman la agua corta, la aguja de escamas redondeadas y la agua corta (Tetrapturus belone), oriunda del Mediterráneo. Todas objeto de estudio y que según la Comisión se encuentran en un estado severo de explotación.Pesca deportiva

Estos peces son grandes migradores, capaces de recorrer enormes distancias, pescando a varias profundidades (más de 300 metros), lo que hace que se consideren como depredadores de último nivel, y de ahí su importancia para el sostenimiento del medio ambiente marino.

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